Puente y calzada romana en Becilla Valderaduey

En un paraje de los alrededores de la localidad vallisoletana de Becilla de Valderaduey se puede visitar un conjunto conformado por un puente y un tramo de calzada, a los que se atribuye un origen en época romana.

El puente actual es alomado, con una longitud de 30 m y una anchura de 3,6 m. Cuenta con estribos colocados en un talud natural y en dos pilas de 3 m de anchura. Consta de tres vanos con arcos de medio punto y tajamares en cuña aguas arriba y con dos espolones aguas abajo.

Tradicionalmente se atribuyó a un origen romano a esta construcción; sin embargo, los últimos estudios parecen situar su obra en época medieval, posiblemente en el siglo XIII. Sabemos que en 1214 el señor de Becilla, Ruy Pérez de Villalobos, dona el puente a la Orden de Alcántara.

Fue paso obligado de la Cañada Real Leonesa Occidental de la Mesta, lo que le otorgó gran importancia en época medieval y en la edad Moderna. Es muy posible que este puente medieval sustituyera a otro anterior, romano, ya que junto al mismo se conservan dos tramos de un camino con la apariencia de calzada romana, en concreto se trataría de un ramal secundario de la vía que unía Asturica Augusta (Astorga) con Cesaraugusta (Zaragoza).

La vía conserva dos tramos a ambos lados del puente de 170 y 156 m respectivamente y una anchura de 4 m con pretiles en los extremos. Está construida elevada con respecto al río, para evitar que las posibles crecidas lo inundaran. También conserva algunas alcantarillas que desaguarían y de las que quedan algunos arcos de medio punto.

Se trata de un conjunto único en la provincia de Valladolid y totalmente visitable y de libre acceso.